La familia está dispuesta a acudir hasta el Tribunal Superior de Justicia para recuperar a su mascota, de una raza caracterizada por su apetito insaciable
DOMINGO MARCHENA
Barcelona
El Ayuntamiento de Barcelona ha decomisado un perro vacunado, censado y con chip identificador, por entender que su sobrepeso es una forma de “maltrato” y “abandono”, aunque su familia -y en especial su propietaria, una niña de 13 años- ha invertido considerables recursos económicos y judiciales para recuperarlo. Toby, el beagle protagonista de esta historia, destapa la cerrazón que a veces convierte la Administración en El castillo de Kafka.